jueves, 9 de mayo de 2013

Y MÁS…..LASAÑA DE MOZZARELLA AL PESTO


Esta receta se la debo a Silvia, una amiga italiana. Ella es vegetariana y encontró en este plato la mejor alternativa a la clásica lasaña boloñesa. Desde que la hago, tengo que decir que mis hijos no quieren otra. Y yo, tampoco.
 


Ingredientes:
12 Láminas de lasaña (prefiero la marca Barilla, es muy buena y se usa sin necesidad de cocción, ni remojo)
4 o 5 Bolas de mozzarella fresca
40 gr. Piñones
2 Dientes de ajo
1 Ramillete de albahaca fresca
½ Vaso de aceite de oliva virgen extra
150 gr. Parmesano (aproximadamente)
Para la bechamel:
2 Cucharadas soperas de mantequilla
2 Cucharadas soperas de  aceite de oliva
3 Cucharadas soperas colmadas de harina
1 l. Leche
Sal
Nuez moscada
Preparación:
En una sartén o cacerola ancha se pone a fundir la mantequilla con el aceite para hacer la bechamel. Una vez derretida la mantequilla, se añade la harina, y se revuelve con una varilla para disolverla bien. Se deja cocer un minuto y se añade la leche sin dejar de mover. Se agrega una cucharadita de sal y nuez moscada recién molida. Se deja a fuego bajo hasta que adquiere una consistencia cremosa, pero no muy espesa. Es importante remover  con frecuencia para que no se formen grumos.
Mientras la bechamel se hace, se cortan las bolas de mozzarella en rodajas finas. Si están muy blandas, las porciones no serán regulares, pero no importa. Se reservan.
A continuación se hace el pesto.  Se ponen en el vaso de la batidora los ajos pelados, los piñones, el aceite de oliva y las hojas de albahaca y se tritura.
Para montar la lasaña, se procede de la siguiente forma: se cubre el fondo de la bandeja con bechamel. Se ponen cuatro láminas  de pasta. Se coloca una tanda de rodajas de mozzarella. Se cubre con bechamel. Se rocía con pesto y se ralla parmesano. Este proceso se repite dos veces más, acabando con una buena capa de queso parmesano. Se hornea a 200º durante  30 minutos aproximadamente, y se saca cuando la lasaña está dorada.
Consejos:
Esta lasaña queda mejor si se elabora con tiempo y se deja reposar un rato antes de meterla en el horno.
De la calidad de la mozzarella dependerá la cremosidad de la lasaña, si bien es cierto, que será más difícil de cortar. Si no se quiere correr riesgos en la presentación, la solución es optar por recipientes individuales.  
En cuanto al pesto, se puede elaborar en un mortero o en la batidora. Si se hace a mano, el color verde será más intenso y los trozos de piñones se apreciarán más, pero, al ser tanta cantidad, requerirá de paciencia y un buen  brazo.  

2 comentarios:

  1. Este finde la pruebo y os digo, tengo unas ganas por que tiene buena pinta y es diferente a la lasaña que yo hago siempre con carne

    ResponderEliminar
  2. La hice este verano pues una señorita llamada Marta me la recomendó y vaya éxito, nos encanto a todos. Un saludo

    ResponderEliminar