martes, 22 de diciembre de 2015

APERITIVO DE SALMÓN AHUMADO RELLENO



¿Vas a poner estas navidades el clásico canapé de salmón? Está muy rico, pero si quieres renovar tus ideas, te propongo estos deliciosos aperitivos fáciles de hacer  y muy atractivos en su presentación.  

Ingredientes:
 
200 gr. Salmón ahumado en lonchas finas
1 Tarrina pequeña de queso crema
1 Aguacate maduro
1 Tomate
4 Pepinillos agridulces (opcional)
Eneldo (para decorar)
 

Preparación: 

Pelar y despepitar el tomate y cortarlo en dados pequeños.
Hacer lo mismo con el aguacate.
Escurrir los pepinillos y picarlos finamente.
Mezclar bien todo lo anterior con el queso crema.
Con el salmón ahumado, hacer tiras de unos 3 o 4 centímetros de ancho y 15 de largo.
Para hacer cada paquetito, poner en un plato o tabla dos de las tiras formando una cruz.
Colocar en el centro un montoncito de la crema de queso aderezada.
Cerrarlo doblando sobre el relleno cada uno de los lados.
Para servirlo, colocar en una bandeja con la parte más bonita hacia arriba, decorado con eneldo picado.  
 

 Consejos: 

Estos aperitivos se pueden servir solos o acompañados de una base de pan crujiente.
También pueden formar parte de una original ensalada.

martes, 15 de diciembre de 2015

SEMIFRIO DE PIÑA Y LIMA




La piña es una fruta presente en prácticamente todas las casas durante la Navidad. No sólo es sabrosa, bonita y exótica, también facilita la digestión y ayuda a limpiar el paladar antes de pasar a los dulces típicos navideños, que son, en su mayoría,  una alabanza al azúcar.
 

Ingredientes: 

4 Rodajas de piña en conserva
100 ml. Jugo de piña
100 ml. Zumo de lima (aproximadamente 4 limas)
200 ml. Nata para montar
4 Hojas gelatina
4 Cucharadas azúcar glas
1 Cucharada cacao puro en polvo
 
Preparación: 

El primer paso es montar la nata y conservarla en el frigorífico hasta el  momento de usarla.
Hidratar las hojas de gelatina en agua fría.
A continuación, se escurren las rodajas de piña y se ponen en la base de unos vasos que permitan desmoldar el postre con facilidad.
En un cazo, se calienta el jugo de la piña y el zumo de lima. Se les añade el azúcar y, una vez comienza a hervir, se introducen las hojas de gelatina hidratadas. Se remueve bien para que se deshagan.
Para que esta mezcla enfríe rápidamente, se echan cubitos de hielo y agua fría en un cuenco grande y se introduce el cazo caliente unos segundos para bajar la temperatura, con cuidado para que no entre agua en el interior. Es como un baño maría, pero para enfriar en vez de calentar.
Cuando ha atemperado, se une a la  nata montada, se integra bien y se reparte en los vasos adornados con las rodajas de pina.
Meter en el frigorífico al menos cuatro horas.
Desmoldar y servir espolvoreado de cacao. 

Consejos: 

Es importante elegir unos vasos rectos, sin formas que puedan entorpecer desmoldar los semifríos.
Para facilitarlo, se puede pasar la punta de un cuchillo por los bordes o introducir unos segundos el recipiente en agua caliente.
Si las rodajas de piña son muy gruesas, aconsejo afinarlas un poco, ya que, de lo contrario, será difícil comerlas y estropeará el bonito acabado.
Por último, advertir que no se trata de un postre muy dulce, predominando la acidez, por lo que es conveniente probar la mezcla final antes de enfriarla y así corregir el punto de dulzor en caso de que fuera necesario.

martes, 8 de diciembre de 2015

SOLOMILLO STRÓGONOFF


 
Para algunos anfitriones, las comidas o cenas de Navidad no se conciben sin un plato de carne, y se complican la vida con asados imposibles de los que siempre sobra demasiado. Esta receta, no solo se hace en un santiamén; además, se puede preparar un ratito antes  y calentar en el  último momento.

 
Ingredientes:

4 Filetes solomillo de ternera
1 Cebolla
1 Brik de nata para cocinar
1 Copita de coñac
1 Cucharadita mostaza de Dijon
250 gr. Champiñones limpios y laminados
2 Cucharadas mantequilla
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta recién molida
 

Preparación: 

En una sartén ancha o cacerola, se pone a derretir la mantequilla junto a una cucharada de aceite.
Antes de que tome color la mantequilla, se marcan brevemente los filetes de solomillo. Se salpimientan y se sacan.
En esa misma sartén, se echa la cebolla cortada finamente y se sofríe a fuego bajo.
Una vez pochada, se añaden los champiñones y se sube el fuego para que  no suelten agua.
Se vierte el coñac y se flambea.
A continuación, se agregan la nata y la mostaza.
Cuando la salsa empieza a adquirir una textura cremosa, se rectifica de sal y pimienta y se introducen los filetes de solomillo que hemos reservado, junto a los jugos que haya soltado.
Se da un hervor y se sirve bien caliente.  

Consejos: 

Me gustan especialmente los champiñones con salsas que llevan nata, como en este caso, pero se puede hacer esta receta solo con la carne y servirla acompañada de arroz blanco.
En el supuesto de tener muchos invitados y, teniendo en cuenta que no todo el mundo se come un  filete entero de solomillo en celebraciones tan copiosas, recomiendo cortar la carne en tiras o dados para evitar poner una pieza entera y que se desperdicie.

lunes, 30 de noviembre de 2015

ZANAHORIAS CARAMELIZADAS



Una guarnición sofisticada para dar ese toque novedoso a tus menús navideños, tanto si es acompañando carne o pescado.   

 
Ingredientes:
 
200 gr. Zanahorias baby lavadas
3 Cucharadas de mantequilla
1 Cucharada de aceite de oliva virgen extra
1 Cucharada de azúcar de caña
Zumo de medio limón
1 Cucharadita de jengibre fresco rallado
1 Copa pequeña de vinagre de Pedro Ximénez
1 Copa pequeña de agua
Sal
Pimienta negra recién molida
Nuez moscada recién molida
 

Preparación:

En una sartén de base ancha, se  funde la mantequilla con el aceite y se agregan las zanahorias.
Se añaden el jengibre y el zumo de limón.
Manteniendo el fuego bajo para que no se queme la mantequilla,  se vierte el vinagre, dejando reducir unos segundos.
Regar con el agua.
Cuando haya hervido unos instantes, se espolvorea con el azúcar y las especias.
Las zanahorias deben cocer unos 10 minutos, quedando caramelizadas, pero no blandas.
Servir calientes o tibias.
 

Consejos: 

Esta guarnición puedes prepararla con antelación y simplemente darle un toque de microondas para calentarla.
Si no encuentras vinagre de Pedro Ximénez, puedes usar de Módena que también le irá muy bien, pero teniendo la precaución de comprar uno bueno, ya que, de lo contrario, la alta concentración de azúcar puede caramelizar en exceso las zanahorias.  

lunes, 23 de noviembre de 2015

EMPANADILLAS DE MEMBRILLO Y NUECES


 
Una propuesta sencilla y rápida para dar salida a ese dulce de membrillo que lleva meses en la nevera o preparar una merienda con tan solo cuatro ingredientes.
 

Ingredientes: 

12 Obleas para empanadillas
120 gr. Dulce de membrillo
Un puñado de nueces
Azúcar glas 

Preparación: 

Se aplasta el dulce de membrillo para hacer una especie de pasta y se le añaden las nueces troceadas.
Sobre cada oblea de empanadilla, se pone un montoncito de la mezcla anterior, suficiente para que no quede hueca, pero no tanto como para que se salga el relleno al cocinarla.
Se humedecen los bordes de las obleas con un poco de agua y se cierran, bien del modo tradicional o, como en el caso de esta propuesta, en forma triangular. 
Se hornean a 180 grados unos 15 minutos o hasta que están doradas.
Se espolvorean con azúcar glas y se sirven templadas o frías.  

Consejos:

Al relleno también se le puede añadir queso manchego, cualquier otro fruto seco o fruta fresca. Asimismo, se puede rebozar en una mezcla de azúcar con  canela, o servirla con salsa de frambuesas o una crema inglesa. Mi receta es un primer paso dar rienda suelta a tu creatividad.
En cuanto a la manera de cocinarla, yo he propuesto el horneado por tratarse del más ligero, pero el crujiente de la fritura es muy adecuado para las empañadillas y, por tanto, también para las dulces.
Respecto a la forma de cerrarla, la realizada por mí es más aconsejable para hornear, ya que precisa menos manipulación y riesgo de abrirse que en el caso ser fritas.

lunes, 16 de noviembre de 2015

ARROZ NEGRO




No es por casualidad que en esta receta prevalezca el color del luto y la tristeza, aunque salpicada de verde esperanza.

 
Ingredientes: 

300 gr. Arroz bomba
4 Calamares frescos de tamaño mediano (y su tinta)
2 Tomates maduros grandes rallados
2 Dientes ajo
1 Puerro
Aceite de oliva virgen extra
1 l. Caldo de pescado
Azafrán molido
Perejil picado
Sal
Pimienta 

Preparación: 

Lavar y trocear los calamares, poniendo la tinta de éstos en un vaso pequeño. Reservar.
Calentar el caldo para usarlo posteriormente.
Limpiar el puerro, picar finamente y echar en una paella donde se han  vertido unas cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Cuando está pochado, se agregan los dientes de ajo machacados. Saltear brevemente.
Introducir los  calamares previamente salados y dejar freír hasta que al pincharlos se comprueba que están tiernos.
A continuación, verter los dos tomates rallados y dejar hacer unos minutos.
Espolvorear el conjunto con el  azafrán molido.
Añadir el arroz y revolver bien para que se impregne del sofrito.
Verter el caldo bien caliente sobre el arroz, calculando, al menos, el doble de líquido.
La tinta se sala y se diluye en un poco de caldo o agua y se incorpora a la paella.
Mientras está cociendo, es conveniente comprobar el punto de sal y rectificar si hace falta, añadiendo pimienta recién molida.
El tiempo de cocción del arroz depende de cada marca y variedad, si bien suele ser de unos 20 minutos.
Cuando se prueba y está al dente, se apaga el fuego y se tapa el recipiente con un paño unos cinco minutos para que termine de hacerse con el  calor residual.
Una vez en su punto, espolvorear con perejil fresco picado y acompañar, si se quiere, con alioli.
 
Consejos:
 
Mi primer consejo es elegir un arroz de calidad, ya que de nada servirá el mimo que le pongamos en la elaboración si éste no responde.
Algo que me suele ocurrir cuando hago paella o similares arroces secos, es que siempre tengo que añadir más caldo que el que correspondería al doble de cereal.
La tinta de calamar fresco es mucho mejor que las que nos venden en bolsitas, que normalmente son de sepia. Ojalá pudiéramos comprar siempre los calamares con su tinta y su hueva sin tener que dejar nuestro riñón.

lunes, 9 de noviembre de 2015

CAZUELA DE RAPE Y ALMEJAS


 
Una receta muy marinera y  perfecta tanto en días de frio como de anticiclón, como el que disfrutamos  actualmente, tan sólo perturbado por lamentables tormentas del este español que espero pasen rápidamente y sin dejar secuelas irremediables.
 

Ingredientes:      

1 Lomo de rape o 6 cachetes
1 k. Patatas para guisar
½ k. Almejas
1 Tomate maduro
8 o 10 Almendras crudas peladas
Caldo de pescado
3 Dientes de ajo
1 Cucharadita de pimentón
2 Rebanadas de pan del día anterior
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta 

Preparación: 

Una vez la almejas han estado al menos una hora en agua salada para que suelten la arena, se ponen un una cacerola con un dedo de agua hasta que se abren. En cuanto lo hacen, se sacan y se cuela el caldo resultante. 
Se pone un diente de ajo picado en una cazuela con un chorrito de aceite. Una vez frito, sin que llegue a dorarse, se le añade el tomate triturado y una cucharadita de pimentón, con  cuidado para que no se queme. Se deja freír y se le agregan las patatas cortadas para guiso. Se les da unas vueltas para que se impregnen del sofrito y se vierte el caldo de las almejas hasta que las cubra. Como probablemente no sea suficiente líquido, se complementa con caldo de pescado.
Se comprueba el punto de sal y se rectifica.
Se deja cocer de 10 a 12 minutos.
Mientras tanto, en una sartén con un fondo de aceite, se fríen dos dientes de ajo pelados pero enteros, las almendras, y las dos rebanadas de pan. Se escurren y se machaca todo en un mortero hasta obtener una pasta. Se liga con una cucharada del caldo que está cociendo.
Se echa el contenido del mortero a la cazuela y se incorpora el rape salpimentado. Se deja cocer unos 3 minutos y se añaden las almejas. 
Se sirve bien caliente.  

Consejos: 

Mi primer consejo es respecto al pimentón, ya que se quema con suma facilidad. Para “curarnos en salud”, lo mejor es apartar la cazuela del fuego y, cuando está bien ligado con los jugos de la cocción, volver a ponerlo en la candela.
El rape es un pescado exquisito, pero caro, al igual que los cachetes, si bien éstos al ser todo carne, no requieren desperdiciar más que la telilla que los cubre. El rape, en cambio, es casi todo cabeza y, o se aprovecha bien, o se pierde dinero. Yo suelo comprarlo cuando está de oferta y sé sacar rendimiento del mismo, ya que con la cabeza hago un gazpachuelo o una sopa, y con el cuerpo, tengo para poner unos trozos en estas preparaciones y guardarme los mejores medallones para otros usos.
En cualquier caso, el rape de esta receta es perfectamente sustituible por otro pescado. Asimismo, se puede prescindir de las patatas y hacerlo solo con el rape y las almejas, para convertirlo en un segundo plato. Reconozco que las patatas guisadas y cocidas son mi predilección, pero hay quien prefiere solo pescado.

martes, 3 de noviembre de 2015

TARTA TATIN DE MANZANA


 
La sutileza de esta tarta, de tan pocos ingredientes, me encanta. Nació de una casualidad, como tantas ideas brillantes, y sólo tiene un inconveniente, que, al ser tan ligera, se come en un santiamén.

 
Ingredientes: 

4 Manzanas Golden (o la variedad que más guste)
60 gr. Mantequilla
5 Cucharadas azúcar glas
Una plancha de hojaldre
 

Preparación: 

Se pone la mantequilla a derretir en una sartén o molde apto para fuego y horno. Antes de que empiece a tomar color, se vierte el azúcar, moviendo el recipiente para que se impregne de la mantequilla.
Una vez el caramelo está dorado, se colocan las manzanas peladas, descorazonadas y cortadas en cuartos.
Se tapa para que se cocinen durante unos 10 minutos a fuego bajo y se dejan atemperar.
Mientras tanto, se precalienta el horno y se trabaja el hojaldre para que quede fino. Se mide el diámetro del molde o sartén que estamos usando, y se corta la masa añadiendo unos centímetros más.
El siguiente paso es colocar el hojaldre sobre las manzanas, remetiendo los bordes de forma que envuelva éstas.
Se hornea durante unos 25 minutos a 180 grados, hasta que el hojaldre está dorado.
Antes de que enfríe, debe darse la vuelta como si fuera una tortilla, con cuidado de no quemarse con el caramelo.
Servir templada. 

Consejos: 

Para evitar que el azúcar cristalice y el caramelo no se haga uniformemente, un truco consiste en pintar el interior del cazo con agua fría cuando el azúcar está derritiéndose.
Esta tarta suelo hacerla con hojaldre, pero hay quien la elabora con masa quebrada. Es de esas recetas en las que no hay unanimidad en cuanto a su elaboración.
Para mí, el paso más complicado es darle la vuelta sin que se desparrame el caramelo, ni quemarte. Yo la hago en una sartén de hierro y tengo que admitir que recurro a mi marido, ya que, entre el peso de la propia sartén y el contenido, el proceso de volverla me cuesta. 

Por último, os voy a mostrar la ocurrente tarta de chuches que regaló María, una amiga de mi hija, a mi hijo Curro por su cumpleaños. El arte también se puede hacer con golosinas. 
 
 

lunes, 26 de octubre de 2015

FOCACCIA CON HIERBAS Y ANCHOAS


 
Este pan italiano aromatizado con hierbas y aceite de oliva es perfecto para acompañar quesos, embutidos, guisos… o para abrirlo y rellenarlo al gusto.  Templado está muy rico, más al estilo de una pizza, pero frio también resulta  estupendo. A mí me encanta comerlo junto a las aceitunas Chicón de Antequera. Cada uno tiene sus vicios y estas aceitunas malagueñas es uno de los míos.
 

Ingredientes: 

250 gr. Harina 

125 ml Agua templada 

25 gr. Levadura fresca 

1 Cucharadita sal

Aceite de oliva virgen extra 

 4 Anchoas de lata en  aceite de oliva  

Hierbas secas  (orégano, tomillo, romero, albahaca) 

2 Dientes de ajo 

Parmesano rallado (al gusto) 

 
Preparación: 

El primer paso consiste en diluir la levadura en el agua templada. 

En un bol amplio se echan la harina y la sal. Se le añade la levadura con el agua y se mezcla bien.

Se vierte un chorrito de aceite de oliva virgen extra y se trabaja  hasta que la masa queda elástica y manejable.

Se deja reposar cubierta de papel film o un trapo en un lugar cálido durante 45  minutos o una hora, hasta que duplica el volumen. 

Mientras tanto, se pone un chorrito de aceite en una sartén y se echan los dientes de ajo muy picados o machacados. Se añaden las hierbas y las anchoas troceadas con su aceite. Se remueve para que quede una especie de pasta y se apaga el fuego. 

Cuando la masa de la focaccia ha crecido, se vuelca en la encimera enharinada y se extiende con las manos hasta obtener una especie de pizza rectangular. Se le hacen unos huecos con ayuda de los nudillos y se vierte un hilo de aceite de oliva virgen extra. Se reparte la mezcla de hierbas y anchoas y se espolvorea con queso parmesano. Nuevamente se deja reposar unos 30 minutos. 

Se precalienta el horno y se mete en la base una bandeja con agua para que produzca vapor. Se introduce la focaccia y se hornea a 180 grados los primeros 15 minutos, subiendo posteriormente a 200 hasta que está lista (otros 10 minutos aproximadamente)

 
Consejos:

 La focaccia se puede aderezar con lo que más guste, queso, hierbas frescas, aceitunas, tomates cherry, etc.

La mezcla de hierbas secas y anchoas con su toque de ajo y bien aceitada me gusta especialmente. Mi recomendación es usar anchoas bien limpias de espinas, ya que, aunque solo usemos unas pocas, puede estropearnos el resultado. 

En cuanto al tiempo de horneado, depende mucho de cada aparato, así como  de si se trata de uno de gas o eléctrico. Al producir vapor con la bandeja con agua, la masa se hace esponjosa y lentamente. Cuando comienza a endurecerse levemente es cuando yo apago el horno. 

jueves, 15 de octubre de 2015

SOPA DE PESCADO AL CURRY



Se trata de mi versión de una receta del cocinero chino Hung Fai, quien pasó por Top Chef sin pena ni gloria, pero me ha conquistado con sus programas en Canal Cocina; no sólo por sus interesantes propuestas, sino también  por su pedagogía y compostura. Reconozco que a algunos, como a Samantha de España, tengo que quitarle la voz para no necesitar un ansiolítico después de contemplarla charlando sin parar  y dando vueltas por la cocina.  De hecho, me cuesta reconocerla en Masterchef, entre otras cosas, por su ausente presencia.
 
Ingredientes: 

1 Puerro
12 Espárragos trigueros gordos
1 Guindilla
1 Cucharada curry en polvo
1 l. Caldo de pescado
1 Vaso leche (también puede ser leche de coco o nata)
Jengibre recién rallado (al gusto)
2 Lomos salmón (de ración)
2 Lomos  rape (de ración)
200 gr. Gambas de Málaga
Aceite de oliva
Sal
Pimienta recién molida
½ Copa coñac
1 Cucharadita maicena (opcional)

Cilantro fresco picado
 

Preparación: 

En un poco de aceite, se sofríen el puerro cortado fino y la guindilla picada.
Se limpian los espárragos y se rallan a lo largo con la ayuda de  un pelapatatas, de forma que queden como tallarines. Se introducen en la cacerola.
Se añaden el jengibre y el curry, mezclando bien, y se vierte el coñac, flambeándolo a continuación.
Se agrega el caldo de pescado caliente y se deja cocer unos segundos.
A continuación, se incorpora la leche y se mantiene a fuego bajo unos minutos para que reduzca. Si aún queda excesivamente líquida, se espesa con un poco de maicena diluida en agua fría.
Se comprueba el punto de sal y pimienta.
Unos minutos antes de servir, se incorporan los pescados limpios y en trozos de un bocado (no muy pequeños) y, finalmente, las gambas peladas.
Se apaga el fuego y se adorna con el cilandro.
 

Consejos: 

La receta de Hung Fai es de una cazuela, pero yo la hago como sopa y, cuando quiero que sea más contundente, pongo en la base de cada plato una ración de arroz blanco cocido. Vierto la sopa con el pescado y las verduras bien calientes para que empape todo el arroz, y se convierte en un excelente plato principal  muy nutritivo y proteínico, pero ligero y sano.
Los que me seguís, sabéis que intento hacer versiones cardiosaludables, pero para quienes pueden permitírselo, sugiero optar por la leche de coco o nata en vez de la leche habitual que consumimos. Incluso la leche evaporada va muy bien, sin llegar a ser tan calórica. 

martes, 6 de octubre de 2015

BROWNIE ROCK & ROLL


 
En la novela “Como agua para chocolate”, la protagonista vertía sus emociones en los platos que cocinada. Algo así debió ocurrirme cuando preparé  estos brownies mientras oía el disco de Carbono 14.  El resultado: sorprendentes, amargos y dulces a la vez y, sobre todo, dejan un regusto a loca felicidad y siempre quieres  más.
 

Ingredientes: 

200 gr. Chocolate negro especial para postres (60% de cacao)
150 gr. Azúcar de caña
3 Huevos
25 gr. Cacao puro en polvo
150 gr. Mantequilla
200 gr. Harina
Una pizca de sal
1 Cucharadita de vainilla 

Preparación: 

Se pone a derretir el chocolate con la mantequilla a fuego lento o al microondas hasta que está fundido.
A continuación, se vierte en un bol y  se le añaden el azúcar, los huevos, la harina, el cacao en polvo, la sal y la vainilla, ligando bien con una varilla para que no se formen grumos.

Se engrasa una bandeja de horno, preferiblemente cuadrada, y se vierte en ella la masa del brownie.
Se introduce en el horno (precalentado) a 180 grados durante unos 25 minutos aproximadamente, hasta que la superficie deja de brillar.
Una vez frio, se desmolda y se trocea.
Se puede adornar con cacao en polvo, nueces, chocolate blanco fundido, etc.   

Consejos:

Es importante que el chocolate que usemos sea de calidad. Yo elegí uno con un porcentaje de cacao al 60%, pero se puede hacer según gustos.
Derretir el chocolate al microondas es comodísimo, pero se corre el riesgo de que se queme, por lo que hay que controlar los tiempos constantemente y removerlo bien cada vez que se saca para que se funda por igual.
Para celebraciones infantiles, se puede adornar cada trozo del brownie con golosinas e, incluso, envolver las porciones individualmente para que cada niño se pueda guardar lo que le quede sin comer en ese momento.

martes, 29 de septiembre de 2015

MERENGUE CON YOGUR Y MANGO


 
El mango es una de mis frutas preferidas, especialmente los de Málaga, insuperables en su sabor y dulzura. Ese punto de madurez solo es posible en una fruta que no ha tenido que volar medio mundo para ser consumida. Me niego a comprar productos para cuyo transporte se ha contaminado innecesariamente y, su gusto, se ha malgastado en el tiempo que les faltaba para estar en plenitud. No, cuando tan cerca disponemos de esas mismas variedades con una calidad inmejorable 

 

Ingredientes: 

Para el merengue:
 
2 Claras de  huevo

1 Cucharada de  maicena

50 gr. Azúcar

1  Cucharada de zumo de limón
 

Para la crema de yogur: 

1 Yogur natural

1 Cucharadita de azúcar o miel
 

Cobertura: 

1 Mango maduro 

 

Preparación: 

Se precalienta el horno a 150 grados aproximadamente.

Se elabora el merengue comenzando por montar las claras y, una vez empiezan a espumar, se va añadiendo poco a poco el azúcar. Se vierte el zumo de limón y, por último, cuando las claras ya tienen la consistencia de merengue, se mezcla la maicena. 

Se mete en una manga pastelera. Sobre una hoja de papel vegetal,  se forman los nidos de merengue poniendo una base y, sobre los bordes, una segunda capa de merengue para que al cocer quede un hueco central. 

Se introduce en el horno y se baja la temperatura a 120 o 130 grados, controlándolos para que no se doren. En 45 minutos o una hora estarán hechos. 

Para la crema de yogur, basta con mezclar éste con el azúcar o la miel y ligarlo bien.  

El mango se pela y se hacen gajos.  

Cuando los merengues están horneados, se dejan enfriar, se rellenan con el yogur y se decoran con el mango.

 

Consejos:
 

El punto de las claras adecuado para esta receta es cuando al sacar la varilla  el merengue no gotea, sino que  forma  un pico con consistencia suficiente para mantenerse. 

Con las cantidades de esta receta salen dos merengues grandes o cuatro pequeños. Para controlar tanto el tamaño como la forma de éstos, lo mejor es dibujar unas circunferencias en el reverso del papel de horno. 

En cuanto al horneado, sabremos que están hechos, cuando al tocarlos están secos y se despegan fácilmente de la bandeja o papel  vegetal.
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El yogur se puede sustituir por nata montada, aunque yo prefiero optar por  recetas, quizá menos suculentas, pero ricas y ligeras, sin tener que alterar nuestros niveles de colesterol. Para quien pueda permitírselo, la nata es una opción estupenda.  

Los merengues son un dulce ligero y saludable. Además, muchas veces nos sobran claras de huevo de preparaciones en las que solo se requieren las yemas. Lo que en mi caso hago, es congelarlas y aprovechar para hacer estos exquisitos postres.  

No por obvio puedo dejar de mencionarlo, y es la sustitución del mango por cualquier otra fruta. Especialmente válidas me parecen las fresas, frambuesas, arándanos, moras, etc. 

 
 
Por último, quiero que la foto del mango de Málaga sirva como apoyo a mi personal cruzada a favor del consumo de productos de cercanía.